Sabias que desde la antigüedad el baño no se había generalizado a que se usara solo agua como hoy día las personas usaban sustancias aromáticas para limpiar o perfumar la piel.
¡¡¡Que rico!!!
Y si se empleaba agua para bañarse, las sustancias aromáticas estaban cerca, ya sea en forma de aceites de baño o como aceites para masaje tras el baño.
En uno u otro caso hacían de antisépticos, mejorando el valor higiénico del baño y ayudando a reducir el olor del cuerpo.
Los antiguos egipcios, especialmente las mujeres y quienes estaban en condiciones de permitírselo, demostraron su altísimo grado de civilización por el bañarse.
Se cree que cada día tomaban una serie de baños: primero uno frío, después otro tibio, por último, uno caliente. El baño caliente, perfumado con óleos fragantes, iba seguido de un masaje aromático, probablemente con aceite de cedro o ciprés.
Mientras que los griegos una de mis culturas favoritas adoptó en algunas similitudes de ese sistema de baño, mientras que los romanos desarrollaron el mismo.
Lo chicos griegos se conformaba normalmente con abluciones más limitadas en una pila de mármol situada en algún lugar público. En cambio, los romanos serían los mayores adictos al baño de todos los tiempos.
Será que por eso Hipócrates logro curar mucha gente al ocuparlo dentro de la sanación de las personas.
Igual que los egipcios, tenían baños públicos, sumamente populares entre los hombres, mientras las mujeres preferían usualmente bañarse en casa.
Y el ritual consistía
- desvestirse y entrar en una habitación llamada con estantes y más llenos de perfumes y ungüentos fragantes para recibir una unción preliminar
- Después se pasaba al baño frío, para darse una rápida friega estimulante.
- Seguía el baño tibio
- Y después al baño caliente, calentado por una estufa situada debajo de él lo que hoy seria el antecesor de nuestro baño de vapor actual. En aquel baño caliente uno se frotaba el cuerpo y derramaba un aceite perfumado o frasco pequeño.
¿¿Y las mujeres??
Las mujeres romanas solían darse los baños en su casa Después del baño se cuidaba el cabello con óleos fragantes seguido de un masaje facial. Pintaban las me mente, se daba un masaje en el cuello y hombros con aceites perfumados. El resto del cuerpo se lavaba ligeramente en agua de rosas.
Ya vez no estamos tannnnn lejanos de lo que se hacía en la antigüedad.
Como hacer el baño con esencias en Casa
Hay varias maneras de emplear esencias en el baño y es fácil preparar una buena cantidad de esos aceites. Hay básicamente dos tipos de aceite de baño: los que se disuelven en el agua y los que no. E
Empezando por el segundo tipo, el método más simple es esparcir unas cuantas gotas de aceite esencial puro en el agua de la bañera de utilizar cualquier aceite esencial, pero no echar demasiado, hay esencias más fuertes que otras y algunas podrían irritar la piel.
Si no estás segura, ten cuidado y empieza echando al principio un par de gotas (se puede aumentar la dosis la siguiente vez).
Con la práctica enseguida encontraremos la dosis idónea. Podemos remover suavemente el aceite en el agua para que forme una oleosa envolverá entonces la piel. Es el momento de relajarnos y disfrutar. No espere notar un efecto inmediato con los sutiles aceites esenciales, es algo que lleva su tiempo.
Puedes hacerlo dentro de una tina, una olla para meter los pies o en su caso con un paño húmedo que llevaras a través de tu cuerpo.
Una vez en la bañera, los aceites esenciales penetrarán en la piel del mismo modo que durante un masaje de aromaterapia. El calor del agua ayuda a esta penetración.
Para lograr un óptimo efecto terapéutico, se suele recomendar el uso de un aceite de baño no soluble, para que nos envuelva el cuerpo al entrar en el agua y quede bien adherido a la piel durante el baño.
Al salir del baño quedará sobre la piel una pequeña cantidad de aceite en el agua. ¿¿Como el secado con toalla no lo elimina del todo qué crees que pasara??
Tu piel ligeramente perfumada.
Puede reforzar su baño aromático, especialmente si tiene la piel seca, frotando un aceite perfumado sobre el cuerpo después de secarse.
Aplícalo untando ligeramente ambas manos con el aceite y después sobre el cuerpo. Eso protege la piel, la con tenue fragancia y además ayuda a contrarrestar el efecto resecante del jabón y el agua en la piel.
Recibir un masaje después del baño, con el cuerpo relajado y sensitivo, puede resultar idóneo y es una buena idea.
Asi que ya lo sabes para mas tips puedes seguirme en mi grupo de FaceBook
Con amor Fabby